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07/02/2023
10 de noviembre | 2022
Nadie desea trabajar en una empresa donde exista un mal ambiente de trabajo. Ya sabes lo que eso supone: discusiones, falta de comunicación o colaboración entre compañeros, escasa productividad, etc. Presta atención a las 7 señales de este artículo que te ayudarán a detectar un mal ambiente laboral porque, recuerda, entre todos tenéis que poner fin esos ambientes tóxicos lo antes posible.
Si estás en un proceso de selección, tienes que evitar este tipo de empresas porque son un matadero para la creatividad y pueden suponer el potencial fin de una carrera profesional con éxito. El mal ambiente laboral no sólo puede matar una empresa sino también a sus trabajadores, física o sicológicamente, por el camino.
Guárdate de estas señales de ambiente tóxico en tu empresa y procura corregirlas para no sufrir sus desastrosas consecuencias.
Las empresas de éxito tienen claro que un buen clima organizacional se traduce inmediatamente en mayor productividad. Todos los elementos que intervienen en la comunidad laboral se benefician de un buen ambiente laboral y una comunicación efectiva. Y está claro que si sucede lo contrario, el rendimiento será cada vez más bajo.
Además, habrá otras consecuencias como atención deficiente al cliente y, por tanto, mala reputación ante el público, posibles socios o inversionistas. Del mismo modo, no se alcanzarán los objetivos planteados y la empresa comenzará su declive. Sin condiciones idóneas en el entorno de trabajo, será imposible la convivencia. Para una buena cultura corporativa, se debe comenzar por establecer claras reglas de juego y los límites que se deben respetar.
Si llegas a una organización en donde detectes alguna de estas señales, ten mucho cuidado, pues te encontrarás con un mal ambiente laboral. Por otro lado, si eres empresario, gerente o simplemente ocupas un cargo de alta responsabilidad, mantente atento a lo que describimos:
Pista 1: Maltrato al personal de parte del líder de la organización
Cuando existe un trato poco respetuoso desde el jefe hacia al personal, es una clara pista de que el clima laboral no es sano. Cuando se habla de liderazgo, se refiere a personas que influyen de alguna manera ante un grupo; tanto de manera positiva como negativa. Está demostrado que los supervisores son muchas veces los responsables de que sus empleados no se lleven bien.
Si no muestra empatía, tiene favoritismo, las asignaciones de tareas son injustas a simple vista, no es un buen empleador. Caso contrario son aquellos que te ayudan a crecer, se comunican de manera eficaz y te motivan permanentemente. ¡Así que presta mucha atención a las acciones del gerente! El Centro de Recursos para el Aprendizaje y la Investigación de la Universidad del Rosario, en Colombia, ofrece un excelente estudio sobre este tema.
Pista 2: Plantilla con alta rotación
Hay que estar claros en algo: si estás trabajando es porque estás buscando prosperidad. Si no hay una estabilidad, ni oportunidades de crecimiento personal, definitivamente no es un buen lugar. Una alta rotación de personal indica que los empleados no son felices allí. Si fuese así querrían quedarse. Una plantilla satisfecha, cumple con la organización y siempre está dispuesta a aportar más de lo que se le solicita.
Pista 3: Alto grado de absentismo
Es uno de los aspectos más comunes cuando hay un mal ambiente laboral y recibe el nombre de ausentismo o absentismo. No hay nada más contaminante para tu salud física y mental que levantarte todos los días temprano para ir a un sitio que no te gusta, con gente que no te cae bien, a hacer un trabajo con el que no te sientes satisfecho. Y muchas veces por un sueldo que no cubre necesidades básicas y ni siquiera te reconocen los esfuerzos.
Si en una compañía los trabajadores faltan “porque sí” y este sentir es colectivo, definitivamente debes renunciar. Si la empresa no revisa y rectifica las causas de ese tipo de actitudes, no será productiva.
Pista 4: Ausencia de compañerismo entre trabajadores
Una comunicación tóxica entre compañeros de trabajo hace la convivencia imposible. Si tienes que pasar, al menos, ocho horas diarias, cinco días, con un grupo de gente, ¿por qué hacerlo difícil? Sin armonía, no hay trabajo en equipo. Si en una oficina, los compañeros no se reúnen a la hora de la comida o no celebran el cumpleaños de nadie, no se puede trabajar allí.
De no corregirse esas conductas, pueden desencadenarse situaciones de acoso laboral o mobbing, el cual se podría presentar en varias tipologías. La Universidad Jaume I (UJI) cuenta con una investigación denominada: Mobbing en el trabajo: Una revisión crítica que te ayudará a comprender mejor este tema. Así podrás determinar si lo estás sufriendo o no.
Pista 5: No se respeta el horario de trabajo
Al igual que las ausencias, las llegadas constantes fuera del horario demuestran que el personal no quiere estar allí. Lo mismo pasa cuando deben quedarse horas extras, ya que la carga de trabajo es mayor a la que deben tener. Lo cierto es que en ambos casos este pésimo ambiente laboral ocasiona que se reduzcan los índices de productividad. Lo ideal es que se cumplan con todas las responsabilidades en el horario establecido.
De esta manera, se contará con el tiempo suficiente para el ocio, la cultura o el deporte. De lo contrario, podría desencadenar problemas de salud importantes.
Pista 6: No existe compromiso con la empresa
¿Cómo comprometerme con un jefe que no me valora o motiva? Es imposible. El ambiente laboral idóneo lo promueve la organización para la que prestas servicio. Existen casos de personas que quizás no son bien remuneradas económicamente, pero que son eficientes en sus tareas y además, las hace con toda la buena voluntad. También existen los casos contrarios, de aquellos que reciben excelentes beneficios pero son deficientes.
El compromiso juega un gran papel en ambos casos. El líder debe cultivarlo en su plantilla procurando que los trabajadores se sientan orgullosos de formar parte del equipo. Si no detectara compromiso, debe tomar acción.
Pista 7: Trabajadores sin creatividad y poca proactividad
Si no te llevas bien con tus compañeros o estás ocupando un puesto que no te satisface profesional o económicamente, es imposible que tengas buenas ideas. Por el contrario, tu actitud será apática, no aportarás al cumplimiento de los objetivos ni explotarás tus cualidades para resaltar en tu empleo. Será muy difícil que aceptes tareas más allá de tus responsabilidades, o harás el mínimo. Definitivamente, el ambiente es negativo para ti.
Ahora que conoces las siete pistas para detectar un mal ambiente laboral, analiza si en tu entorno se presentan algunas de ellas. Si es así, procura tomar las correcciones lo más pronto posible o comenzarás a sufrir las consecuencias. No importa si eres trabajador o directivo, desde ambas posiciones puedes tomar acciones. ¿Sabes por dónde empezar? Por ti.
