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01 de diciembre | 2022
El entorno laboral siempre ha estado ligado a la oficina o las instalaciones de la empresa. Con la extensión de Internet y la llegada de la pandemia de coronavirus nos hemos acostumbrado a que nuestro hogar se convierta también en nuestra oficina gracias al teletrabajo. A estos dos entornos laborales se les conoce como primer y segundo espacio laboral, respectivamente.
Ni en casa ni en la oficina. A estos dos espacios se les ha sumado lo que se conoce como tercer espacio laboral. Este espacio puede ser un coworking, una cafetería, una biblioteca o el lobby de un hotel. El tercer espacio aporta numerosos beneficios que te exponemos en este artículo, desde una mayor creatividad a sinergias profesionales fruto de la colaboración.
Aprende aquí cómo crear un tercer espacio laboral adecuado a tus circunstancias y descubre cómo lo aplican las grandes empresas en sus instalaciones.
El primer espacio se refiere a la oficina, el lugar creado únicamente para llevar la rutina laboral. El segundo espacio es el hogar, que se puede habilitar para trabajar con la ventaja de no tener que desplazarse. El tercer espacio, y la razón de nuestro artículo, es una fusión entre ambos, un lugar alternativo que permite la interacción social, la comodidad, la concentración y la productividad.
En otras palabras, el tercer espacio es lo mejor de ambos entornos y puede ser creado dentro de la misma empresa o escogido por ti. La clave es que brinde comodidad, libertad para que fluyan las ideas, que inspire sentido de pertenencia, sea acogedor y brinde las tecnologías necesarias para trabajar.
Pero ante todo, ese lugar debe ser un punto de encuentro, para intercambiar saberes, para comunicarse tranquilamente, para favorecer la cohesión grupal. De modo que no basta que sea un simple comedor o un espacio pequeño donde pasar el descanso. Es un lugar acondicionado para ello.
¿Cuál es el objetivo?
Con el tercer espacio se busca estimular las relaciones profesionales, la creatividad, promover la relajación, que el trabajador pueda cambiar de ambiente para que en su cerebro fluyan las ideas en libertad, salir de la fatiga de procesos sistemáticos que convierten al recurso humano en robot.
¿Dónde puede funcionar?
En un trabajo realizado por el diario El Economista titulado “Ni en casa, ni en la oficina: a trabajar en remoto en el tercer espacio” se explicó que el tercer espacio puede funcionar perfectamente en un coworking, en el lobby de un hotel, una cafetería, un aeropuerto, un jardín público. Ni siquiera es preciso que se ubique dentro de la empresa pues el trabajo se puede llevar a cabo de manera remota evitando así atarse a una oficina, estar encasillado en cuatro paredes, hacer desplazamientos innecesarios.
En el mismo trabajo se aclara que si bien la casa ha sido la mejor opción durante la pandemia, puede hacer difícil la interacción profesional, la concentración, el seguir horarios de trabajo y descanso, por lo cual se termina trabajando más que en una jornada en la oficina.
• En una entrevista realizada a Mireia Las Heras, académica de número de la Real Academia Europea de Doctores-Barcelona 1914 y profesora de la Escuela de Negocios IESE, se destacaron dos beneficios principales de esta modalidad. El primero es que da más tiempo para la conciliación familiar. El segundo, es que se reduce la contaminación ambiental pues disminuyen los desplazamientos a la oficina.
• Estimula la creatividad y la proyección de ideas.
• Promueve la comunicación entre compañeros.
• Facilita el establecimiento de contactos profesionales con personas de otros ámbitos.
• Permite salir de la rutina laboral y la fatiga que implican los procesos.
• La colaboración fluye de manera natural, no porque sea impuesta.
• Se da una cohesión grupal producto de la comunicación asertiva.
• Al darse todo lo anterior, es notable el incremento en el nivel de productividad de cada trabajador y en conjunto.
En el diario La Vanguardia se hace referencia a ciertas claves que debe tener el tercer espacio, según recomendaciones de Alejandro Pociña, presidente de Steelcase en España:
1) Una adecuada tecnología (Internet), a fin de poder compartir los contenidos, buscar información, hacer presentaciones o videoconferencias.
2) El diseño debe ser acogedor, atractivo, con mobiliario cómodo, iluminación adecuada, música y colores relajantes. El principal objetivo es que brinde una atmósfera de tranquilidad.
3) El tercer espacio se ve como un workcafé, por lo que deberás contar con impresoras, alimentos, bebidas, periódicos, revistas, pantallas y todas aquellas herramientas que sirvan para apoyar al trabajador en su labor.
Starbucks, Google, Facebook, Airbnb: ejemplos indiscutibles
Los gigantes productivos Starbucks, Google, Facebook, Airbnb entienden el concepto y la potencialidad del tercer espacio, por lo que no solamente le dedican espacios concretos sino que también todas sus instalaciones van destinadas a fomentar la correlación, creatividad, comodidad y efecto acogedor.
En sus oficinas verás toboganes, sofás muy cómodos, pantallas gigantes informativas, tecnología al alcance de todos, diseños inspiradores, mensajes motivacionales. Starbucks, por ejemplo, es un lugar ideal de encuentro para armar proyectos o trabajar con el portátil medio turno; gracias a su aroma a café, wifi gratuito, diseño atractivo y la calidez que brindan tanto sus áreas como los trabajadores.
Si te enamoraste del tercer espacio, te damos algunos consejos para adaptar tu trabajo a este concepto:
• Acude a los lobby de hoteles, cafeterías de este estilo, bibliotecas que tengan habilitados dichos lugares. Con eso nos referimos a puertos para cargar los dispositivos móviles; conexión gratuita a Internet, rápida y estable; donde existan mesas y sillas cómodas que te permitan trabajar varias horas. Sería ideal si cuentan con servicio de comida.
• Ve a un coworking, es decir, un lugar ajeno a la oficina donde compartirás el espacio con otras personas. Esto es de gran ventaja porque te permitirá interactuar con profesionales diferentes, hacer networking, conocer de otras áreas, hacer surgir tus ideas a raíz de la interacción de talentos.
• Aprovecha los jardines públicos o plazas y trabaja mientras disfrutas del aire libre, de otra vista que no es la ventana de tu oficina. En esto caso es necesario que cuentes con un portátil, batería extra, datos de Internet en el móvil y alguna merienda.
Si se te viene a la mente habilitar un lugar de casa para ello, recuerda que no se trataría de tercer sino de segundo espacio. Estarás cómodo y sin distraccciones pero tendrás que ser disciplinado y establecer horarios concretos. Sin embargo, no podrás establecer relaciones profesionales o intercambiar ideas in situ.