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Islandia está entre los destinos más perseguidos entre aquellos que desean trabajar en el extranjero. Y lo es tanto por su calidad de vida (paisajes, tranquilidad y amabilidad de sus gentes) como por sus excelentes condiciones de trabajo. Te explicamos en este artículo todo los que necesitas saber si quieres trabajar y vivir en Islandia.
Aquí vas a conocer los requisitos para trabajar en Islandia y nuestros consejos para encontrar un empleo en ese país, ya sea en su capital, Reikiavik, o en el resto del territorio de esta pequeña y hermosa isla. Descubre también el salario medio y mínimo en Islandia, cuáles son los empleos más demandados y qué posibilidades hay de encontrar trabajo sin conocer su idioma o dominar el inglés.
Si deseas cumplir tu sueño de emigrar a Islandia, este post te va a resultar imprescindible.
Si deseas vivir en Islandia los requisitos fundamentales son tu pasaporte y el permiso de residencia. De este último existen tres tipos: de estudios, por reunificación familiar y de trabajo. Para obtenerlo debes seguir ciertas normativas legales pero es la forma más fácil de conseguir un trabajo en Islandia. En principio, debes ser mayor de 18 años de edad y demostrar que tienes una oferta de empleo en el país.
El contrato es normalmente el comprobante que certifica que tienes trabajo allí. Igualmente, se requiere la Tarjeta Sanitaria Europea (+E-100) y el certificado de Seguridad Social (E-301). Además, es obligatorio poseer el DNI islandés o 'Kennitala' y el certificado expedido por tu país de origen que justifica tu falta de antecedentes penales. Igualmente, debes contar con todos tus documentos probatorios de estudio y profesionalización legalizados.
En general, la tasa de desempleo de esta nación nórdica no supera el 5%. Muchos islandeses cuentan hasta con dos trabajos; dependiendo del horario convenido. Si estás decidido a emigrar a este país, aquí te explicamos todos los detalles y recomendaciones sobre cómo emigrar a Islandia.
Hay algunos consejos muy válidos sobre cómo es vivir en Islandia. Por ejemplo, este país tiene alta demanda de profesionales en áreas como turismo, construcción, servicios sanitarios, agricultura y pesca, y generación de energía. Así que si estás graduado en alguna carrera relacionada, consulta las oportunidades de empleo existentes. Eso sí, debe ser antes de llegar al país; pues no podrás permanecer un día más de lo permitido en su territorio.
Por otro lado, es necesario que cuentes con suficiente dinero; ya que debes demostrar al Estado que podrás mantenerte solo, o con tu grupo familiar, sin el auxilio del gobierno mientras permaneces allí. Así que si piensas en Islandia para vivir y trabajar toma en consideración hacerlo en una provincia, mientras te estabilizas.
Las ofertas de trabajo en Islandia más accesibles para personas menos cualificadas, están en las fábricas de alimentos, aluminio o granjas. Mientras que los puestos de trabajo en hoteles y restaurantes se duplican en la estación de verano, que es cuando se reciben más turistas. Un dato importante es que la brecha laboral es nula, así que tus ingresos no se calculan en base a tu género, sino tomando en cuenta tu desempeño y profesionalización.
El salario mínimo interprofesional no existe en Islandia, ya que cada sector laboral establece el tope más bajo de ganancia mediante los convenios colectivos. El salario mínimo está en torno a 2000 euros. En contraste, el sueldo medio en Islandia al año se acerca a los 60000 euros, representando la cuantía neta que recibe el empleado independientemente del contrato por el que se rija.
Ahora bien, el coste de la vida es alto en comparación con países como España, por eso es muy importante que evalúes los montos brutos y netos de cada vacante. De tu bolsillo saldrán, impuestos, los cuales se calculan de acuerdo a lo que percibas; también servicios públicos, transporte, alimentación y educación, por lo tanto, es mejor optar por buenos empleos o te será imposible ahorrar.
En cuanto a la vivienda, es costosa, tanto para alquilar como para comprar. No obstante, en las poblaciones más alejadas de Reikiavik los precios son más bajos. Lo más recomendable es hacer las diligencias inmobiliarias desde tu lugar de partida, sobre todo si viajas con niños. Cuando ya comiences a vivir en Islandia puedes buscar un sitio que se adapte mejor a tu bolsillo y necesidades.
Para buscar trabajo en Islandia puedes visitar sitios webs especializados en ello, como Ninukot, el Servicio Público de Empleo o Red Eures. También están disponibles Public Sector Jobs in Iceland, Vinna, Erasmus o Alfredo, entre otros portales. Si utilizas algunas de estas opciones de sitios de empleos en Islandia podrás postularte y enviar tu curriculum vitae desde estas plataformas o a través del correo electrónico.
De igual forma, en este país aún goza de gran popularidad publicar anuncios de empleo en la prensa impresa. El diario más popular y de mayor tirada es el Morgunbladid; así que si en él encuentras una oferta atractiva, podrás llevar tu CV en persona a la empresa.
La densidad de población en Islandia facilita el acceso al trabajo, ya que no pasan el millón de habitantes. Además, no aplica ningún tipo de restricciones a las personas que provienen de los países miembros del Espacio Económico Europeo (EEE) y de la Unión Europea (UE). Sin embargo, si vas a estar más de tres meses, debes tramitar la residencia por motivo de trabajo. Sobre todo, si eres un personal cualificado o en un área con escasez de trabajadores.
La mayoría de los islandeses dominan el inglés. Es una gran ventaja porque el islandés no es fácil de aprender. En definitiva, no puedes trabajar en Islandia sin saber inglés, a menos que manejes el idioma oficial; lo cual te abrirá el camino para cargos superiores. Hay escuelas que enseñan islandés en todo el país. Si ya estás trabajando, las organizaciones sindicales pueden facilitarte una formación gratuita.
El trabajo en Islandia para españoles o latinos no bilingües, está muy mal pagado y normalmente son los empleos más pesados. Asimismo, si hablas alemán o polaco puedes recibir ofertas, ya que la mayoría de los inmigrantes provienen de Alemania y Polonia, naciones con las que Islandia tiene una fuerte relación comercial.
